jueves, 21 de agosto de 2008

Benedicto XVI y Santa Rosa de Lima

Benedicto XVI: Caminar en compañía de los santos
SANTA ROSA DE LIMA


Intervención en la audiencia general de este miércoles





CASTEL GANDOLFO, miércoles 20 de agosto de 2008 (Zenit.org)


Ofrecemos la intervención que pronunció este miércoles Benedicto XVI durante la audiencia general que concedió a los peregrinos congregados en el patio del Palacio Apostólico de Castel Gandolfo, y a los que por falta de espacio aguardaban fuera del recinto* * *

¡Queridos hermanos y hermanas!Cada día la Iglesia ofrece a nuestra consideración uno o más santos y beatos a los que invocar e imitar. En esta semana, por ejemplo, recordamos algunos muy queridos por la devoción popular. .. El sábado ... rezaremos a santa Rosa de Lima, primera santa canonizada del continente latinoamericano, del que es la principal patrona.

Santa Rosa solía repetir: "Si los hombres supieran qué es vivir en gracia, no se asustarían de ningún sufrimiento y sufrirían con gusto cualquier pena, porque la gracia es fruto de la paciencia". Murió a los 31 años en 1617, tras una breve existencia llenas de privaciones y sufrimientos, en la fiesta del apóstol san Bartolomé, del que era muy devota, porque había sufrido un martirio particularmente doloroso.

Queridos hermanos y hermanos, día tras día la Iglesia nos ofrece la posibilidad de caminar en compañía de los santos. ¡Qué importante y provechoso es, por tanto, el empeño por cultivar el conocimiento y la devoción de los santos, junto a la cotidiana meditación de la Palabra de Dios y el amor filial hacia la Virgen!

...Cada día del año nos ofrece la oportunidad de familiarizarnos con nuestros patronos celestiales. Su experiencia humana y espiritual muestra que la santidad no es un lujo, no es un privilegio de unos pocos, una meta imposible para un hombre normal; en realidad, es el destino común de todos los hombres llamados a ser hijos de Dios, la vocación universal de todos los bautizados. La santidad se ofrece a todos; naturalmente no todos los santos son iguales: son de hecho, como he dicho, el espectro de la luz divina.

Y no es necesariamente un gran santo el que posee carismas extraordinarios. Muchos de sus nombres sólo Dios los conoce, porque en la tierra han llevado una existencia aparentemente normalísima. Y precisamente son estos santos "normales" los santos que Dios habitualmente quiere. Su ejemplo testifica que, sólo cuando se está en contacto con el Señor, se llena uno de su paz y de su alegría y de este modo es posible difundir por todas partes serenidad, esperanza y optimismo.

1 comentario:

Curiosus Omnium Rerum Spectator dijo...

Muchas gracias por este magnífico blog. En este hermoso día de nuestra celestial patrona, les envío mis felicitaciones y me permito incluirles el vínculo siguiente del sitio en el que se han publicado unas Letanías de Santa Rosa, por si quieren reproducirlas para aumentar la devoción a tan gran santa:

http://panodigital.com/30-de-agosto-santa-rosa-de-lima-patrona-de-america

Un saludo muy cordial. Rodolfo.